A todos los usuarios les preocupa la intimidad de sus datos privados y personales cuando se navega a través de Internet o se ofrece cualquier información a una empresa en un web. Para proteger todo esto la AECE (Asociación Española de Comercio Electrónico) acaba de crear un código ético para promover la protección de datos personales en Internet.
Una de las principales preocupaciones de los consumidores al entrar en Internet es la posibilidad de que sus datos puedan ser captados y archivados en bases de datos sin su conocimiento. Para salvar este freno a la navegación y al comercio electrónico, la AECE (http://www.aece.org) ha elaborado el primer Código Ético de Protección de Datos en Internet, para ello ha contado con el apoyo y la tutela de la Agencia de Protección de Datos (APD) y las principales asociaciones de consumidores.
Este código fue presentado el por la AECE el 26 de noviembre, y es de especial importancia al tratarse del primer código de este tipo elaborado no sólo en España, sino en el conjunto de la Unión Europea. Por ello la Federación Europea de Marketing Directo (FEDMA) ha decidido adoptar este texto como modelo para la protección de datos personales en Internet para todo el Continente.
El sello de garantía elaborado para este proyecto consiste en una bonita «g» con una arroba dentro, que identifica a las empresas acogidas a la normativa. Esta marca les obliga a decir, en voz alta, qué datos toman y qué hacen con ellos. Será la propia AECE se encargada de efectuar auditorías para comprobar que se cumplen todas las premisas del código.
La FEDMA ha remitido ya el texto y el sello de garantía elaborados por AECE a todas las asociaciones nacionales europeas con el objetivo de el sello de garantía se convierta en símbolo de la protección de datos en Internet en todo el continente. Con este texto las empresas españolas se convierten en pioneras en el respeto a la protección de datos personales en Europa y se adelantan también a las norteamericanas, que aunque están estudiando un desarrollo similar aún no lo han aprobado definitivamente.
Aunque los castigos para los que no cumplan no son muy severos y la especial protección a los menores (incluida en el código) tropieza con el inconveniente de saber quién es menor, es un buen comienzo. La AECE desea que hasta las más diminutas pymes puedan acogerse al código, por ello, el software no valdrá más de 15.000 pesetas.
Deja una respuesta